Arantza, futura cuarta generación de los García, es ese aire fresco que se necesita en una carpintería con tanta tradición como la nuestra. Siempre da el toque exquisito que diferencia a una interiorista del resto de los mortales. Atenta, alegre y siempre con optimismo transforma los diseños llevándolos del papel a infografías donde los clientes se ven ya haciendo una paella en su  nueva cocina o llenando de ropa el vestidor de sus sueños, antes de tenerlos montados en casa.